Fuimos a Gante desde Brujas en tren, hay muchísimos trenes, uno cada media hora, y el trayecto es muy corto.
La ciudad, lo poco que vimos, ya que no teníamos mucho tiempo, apenas una mañana, nos pareció muy sobria, señorial y con un aire renacentista y gótico increíble.
No es demasiado grande, y el centro está muy bien delimitado, aunque creo que todo merece la pena de visitar
San Nicolás.-
Nos centramos en el triangulo de las tres torres, lo mas céntrico, es decir visitamos la iglesia San Nicolás que mira a la plaza Korenmarkt.
La financiaron los comerciantes y otros gremios del puerto, por eso esta dedicada a su patrón
Es una autentica maravilla gótica, es gratis la visita y merece mucho la pena visitarla.
El campanario.-
Desde allí fuimos, ya que esta muy cerca, a visitar el campanario o Belfort.
Una torre vigiá compuesta por varios pisos que se visitan y nos van relatando la historia del edificio.
La entrada cuesta unos 5 euros la subida a la torre (95 metros), pero merece la pena ya que hay unas vista impresionante de Gante.
La catedral.-
Nos dirigimos luego hacia la catedral de San Bavon, en la plaza Sint-Baafsplein también de estilo gótico, muy bonita
Es la iglesia mas antigua del centro de Gante con un púlpito impresionante.
La vista es gratuita , salvo si quieres visitar la parte donde se encuentra el famoso retablo de «La adoración del cordero Místico» .
Un paseo por el puerto.-
Después de esto nos dedicamos a pasear un poco por las inmediaciones y vimos el Castillo de Gerardo el Diablo, muy sobrio por fuera.
Y el Muelle de las Hierbas, el antiguo puerto del medievo en el rio Leie.
Ya de camino para la estación de vuelta a Brujas , dimos un paseíto por la calle principal, repleta de tiendas donde encontramos preciosas chocolaterías y pastelerías y las franquicias de toda Europa.
Y vez vista un poco la ciudad nos volvimos a Brujas en tren.