El Cairo. Egipto.

La ciudad mas bulliciosa y anárquica que yo conozco.
Donde el caos y la magia se unifican. Olores, ruido, lujo y miserias, todo se une en esta ciudad.

La Ciudad.-

Los coches no respetan los semáforos que hay (muy pocos realmente) , y los peatones tampoco. Nadie hacen ningún caso de las señales o pasos de cruce.
Los pitidos de los coches y motos  han adquirido su propio significado y  dan origen a un lenguaje en clave que solo los cairotas entienden.

Pero desde luego la ciudad tiene un encanto especial.
Es una ciudad con muchos olores propios, los cafés, las terrazas, y los residuos, le dan un aire desmantelado y a la vez misteriosa.
Contrastan su grandes avenidas con sus barrios llenos de callejuelas estrechas y serpenteante.

Nosotros nos alojamos en el Hotel Oasis , está situado un poco a las afueras de la ciudad, muy limpio , con zonas ajardinadas y una piscina que tiene una buena terraza.
Las habitaciones en forma de semicírculos , separadas unas de otras , son espaciosas y confortables, todo estaba muy cuidado, y el buffet es abundante.

Las Pirámides.-

La primera visita que hicimos.
La Pirámides de Giza. Para nuestra sorpresa están casi en la misma ciudad de Giza (siempre pensé que estaban alejadas de centros urbanos).
A unos pocos kilómetros del Cairo.

Cuando llegamos el guía nos explico el simbolismo etc….
Te dan tiempo libre para visitar el interior si tu quieres.
Como no  teníamos contratada la entrada a la Gran Pirámide de Keops, que se hace con mucha antelación, nos recomendó que lo intentáramos con la Pirámide de Kefrén.

El tiket se adquiere allí mismo, no hay demasiada cola, y solo entra un número determinado cada vez.
La entrada es muy estrecha, con unas pequeñas escaleras por las que vas descendiendo.
Lo primero es la sensación de falta de aire aparece, ya te dicen que si sufres algún tipo de enfermedad respiratoria o cardiaca no debes entrar. En nuestro caso un turista se desvaneció en el corredor central, muy estrecho y tapono tanto la entrada como la salida. Por cierto los vigilantes egipcios no hicieron absolutamente nada, lo socorrieron otros turista (estudiantes españoles de medicina, en viaje fin de carrera) que lo sacaron hasta la salida.

Se visita la cámara subterránea, que contiene algunos sarcófagos abiertos y desmantelados, las pinturas en las paredes son importantes, pero sobre todo es la sensación de estar en un lugar con una significación especial.
Después nos trasladamos a unos cuantos kilómetros. Hacia la zona desértica.
Desde ahí puedes observar una visión de conjunto de las tres pirámides.
Se hacen las fotos en perspectiva y las fotos divertidas.
Después nos dedicamos a ver la Gran  Esfinge de Giza, que aguanta solitaria el paso del tiempo.

La visita al Museo de los Papiros es ineludible.
Te explican de forma bastante didáctica como se hacían los antiguos papiros, reviven todo el proceso y además es un buen sitio para comparar algunos si quieres.

Siempre entendemos que los motivos que tratan son reproducciones de pinturas de templos y tumbas.

Recorriendo la ciudad.-

Otra de nuestras visitas fue a la Ciudadela de Saladino. 
Esta ciudad alberga varios recintos , entre ellos  el museo militar, varias mezquitas , y otros que no se visitan.
Allí nos expliaron el simbolismo de las mezquitas y el significado para los árabes de dichas construcciones.

La llamada «Ciudad de los Muertos» o Al Qarafa (cementerio en árabe)  constituye la vivienda de cientos de cairotas.
No llegamos a bajar del autobús , ya que según el guía no son muy partidarios de las visitas turísticas.
Era casi de noche y no lo considero oportuno.

Pero impresiona ver como la vida surge de los mausoleos y las tumbas. Había teles, su sofás y se veían familias cenando.
Incluso talleres mecánicos etc, además con cierto prestigio.

Cuando necesitan enterrar a algún difunto del propietario del mausoleo, separan los muebles y hacen el enterramiento.
Después del óbito reanudan la vida familiar como si nada

Dentro de las mezquitas, la mas importante es la Mezquita de Alabastro.
E
s impresionante, magnifica , tanto los patios como el interior están llenos de detalles y filigranas.

Debéis tener en cuanta que no se permite la visita ni con pantalones/falda cortas , ni tampoco con camisetas de tirantes.
Las normas son estrictas y te tienes que poner una túnica (de dudosa higiene) que ellos te proporcionan. Aconsejo llevar un foulard grande siempre en el bolso , con el que poderte cubrir.

El Gran Museo.-

El Museo Egipcio de El Cairo , es un mundo en si mismo. La cantidad de material que contiene es inmenso, resulta difícil poder verlo todo , ya que hay muchas estanterías, sarcófagos , estatuas  etc… que se ha descubierto a lo largo de las excavaciones, incluso parte del tesoro de la tumba del faraón Tutankamón también lo podemos encontrar allí, pero todo esta un poco anárquico, esta catalogado y en expositores , pero hay muchísimo . Actualmente lo han mejorado y creo incluso cambiado de ubicación, pero sigo recomendando su vista.

Perderse en el Gran Bazar.-

Por ultimo quiero mencionar el Gran Bazar de la ciudad.
Jan el-Jalili , bullicio, regateo y comerciantes que te venden hasta el aire… no lo dudéis , es único.

Como en todos estos bazares lo mejor es saber que quieres comprar, ya que empiezan a ofrecerte cosas y terminas cargando con tonterías de muy poco valor,  ya que los vendedores son muy insistentes .
Uno de los lugares que merece la pena visitar en las inmediaciones de este bazar es el Café de los Espejos o café de Fishawi.
Un lugar único, lleno de vida, con mucha gente siempre y con sus paredes llenas de espejos antiguos, cierto aire de misterio y desde luego protegido del paso del tiempo. Allí jamás tengáis prisa.

Podemos encontrar tanto turismo como población egipcia disfrutando de un buen te y una cachimba.